El discurso académico y la producción artística son un reflejo de lo que les rodea. Las personas que forman el mundo del arte, obviamente también han interiorizado las necesidades del sistema en el que viven y desarrollan teorías que se adaptan al mismo.
Excepcionalmente aparece una teoría revolucionaria, como el postmodernismo. El postmodernismo es al arte lo que el socialismo a la política: una buena idea que nadie parece saber aplicar en la práctica. El postmodernismo proclama que la belleza estética no existe y que una vez que nos damos cuenta de ello somos libres de descubrir la belleza en cualquier parte, y no sólo en los objetos que consideramos objetos artísticos. Esta idea destruye la autoridad del mundo del arte en temas como la belleza y lo que se considera estéticamente significativo. Por eso el mundo artístico trata de domesticar el concepto y pretender que no existe realmente.
Sin embargo, el mundo del arte ya perdió la autoridad que tenía cuando dejó de ser el intrumento propagandístico del sistema. La belleza era el único concepto sobre el que el mundo del arte retenía autoridad, pero llegó el postmodernismo y disolvió la autoridad que quedaba.
La documentación fotográfica de la realidad y su uso en los medios de comunicación arrebató la autoridad que el mundo del arte tenía sobre el concepto de verdad. A la belleza la liberó el postmodernismo. La autoridad sobre los demás temas: el gusto, la forma, el estatus, etc., está en manos de la publicidad. Al declarar que el único fin del arte era el arte mismo, el mundo del arte declaró su pérdida de autoridad irrelevante.
La proclama del arte por el arte, que incluye al arte comprometido socialmente (y por eso no funciona), salvó al mundo del arte cuando éste vio amenazada su existencia con la llegada de la fotografía y el socialismo. Pero los muros que construyó se acabaron convirtiendo en una cárcel. Desde su celda dorada el arte pretende ser rebelde, se niega a verse como el producto perfecto que es: elitista, vacío e innecesario.
Si al arte no le interesa la verdad, que no quiere ver, ya no tiene nada que decir sobre la belleza, ni admite ninguna función que no sea la de autoperpetuarse ¿tiene algún sentido que siga existiendo?
En el mundo del arte la falta de criterio artístico significativo quizá sea más acusada aún que la falta de criterio en el resto de la sociedad precisamente porque se autoproclamó artículo de lujo.
Dentro del mundo del arte, el análisis de la calidad de los objetos que son proclamados obras de arte brilla por su ausencia. Parece ser políticamente incorrecto decir que una obra de arte es buena y por qué. Incluso en círculos artísticos de élite flota el temor a responsabilizarse de una opinión y defender con argumentos un criterio fundado en conocimiento.
No creo que la máxima socrática de cuanto más sé más sé que no sé nada sea el motivo de tal falta de voluntad de decidir lo que se considera artísticamente significativo. Creo que el mundo del arte, en general, se siente confundido y está asustado de lo que percibe como su irrelevancia. Como ante cualquier temor, la reacción del mundo del arte es defensiva. La jerga artística es cada vez más complicada, cada vez hay que estudiar más para acabar descubriendo que la belleza está en todas partes y que lo que es artísticamente significativo lo decide el mercado, basándose en el precio que puede obtener por cada producto artístico. Quizá por miedo a contradecir al mercado, el mundo del arte aprende de la publicidad y fomenta entre sus miembros la ansiedad no de no tener, pero de no entender, lo suficiente. La acusación de no entender de qué va una obra de arte pende pesada sobre las cabezas de artistas y críticos, amenazando con caer. (¿Estará llena de carbón o de papel?)
La reacción ante esta ansiedad permanente es, de nuevo, defensiva, y se escuda en la opinión. Si no tenemos criterio por lo menos tenemos opinión. Es nuestro derecho democrático. Así, el criterio artístico queda reducido a me gusta o no me gusta. Para mí funciona. Lo compro.
El mundo del arte en el contexto actual forma parte de El arte comprometido, mi trabajo de investigación para el Máster en Bellas Artes de Central Saint Martins College of Art and Design en Londres en 2007.
Todos los artículos de El arte comprometido:
- Introducción
- ¿Qué es arte?
- La función del arte en la historia
- El contexto actual
- Cómo influye en las personas el contexto actual
- El mundo del arte en el contexto actual
- La figura del artista
- El arte comprometido